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La verdad es 4 cafres que lo único que buscan es la gloria sin importarles los medios, con grandes perjuicios tanto como para la salud como para su propio deporte que practican, y según ellos aman lo desvirtuan y hacen creer que todos son igual de tramposos como ellos. Sólo buscan la gloria y lo peor de todo es que ellos sólo son la punta del iceberg, si los médicos de los equipos no les pasaran el dopaje (ya sea CERA, transfusiones...) nada de esto pasaría.
Los que llevan la gran parte de la culpa son muchos managers en vista de que no consiguen las suficientes victorias, o que quieren aumentar su prestigio hacen que se dopen aunque luego lo nieguen diciendo que no sabían nada. Hay algunos que lo que dicen es cierto, pero si haces controles sorpresas internos al dopado lo vas a pillar por narices.
Muchos casos de ciclistas son famosos. Unos, como Riccó, grandes promesas del ciclismo mundial que parecía que se iban a comer el mundo y ahora están lacrados por sus errores del pasado.
Otros, como Davide Rebellin o Moisés Dueñas que estropean toda una carrera ciclista en algunos casos muy brillante por ser cazados dopados.
Como no acordarse del gran Marco Pantani, quien estando a dos etapas de ganar otro Giro y convertirse en un semidios italiano da una tasa del 52% excediéndose del 50% y muere al poco tiempo tras caer en las drogas por un mísero 2%.
Pero, de todos los casos, los más tristes son esos que tan poca repercusión tuvieron de chicos de 15 y 16 años en Portugal, y de amateurs que iban para pros sobrados en Italia que fueron cazados infraganti.
Esta gran lacra que es el dopaje parece que no tiene solución, por muchas operaciones, multas, sanciones... que se pongan, no se eliminará del todo hasta que no cambie radicalmente la mentalidad de todo el mundillo ciclista, desde directores a utilleros, de médicos a mecánicos y sobre todo los ciclistas, que deberían negarse en rotundo a realizar estas prácticas.
by vinadas1
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